a menudo después de nuestras
mayores decepciones. "
Henry Ward Beecher
Para muchos un sueño, lo que debería ser una condición natural, es algo imposible de alcanzar. Justificados tal vez en "esta fue la vida que me toco", para muchos otros, seguramente, producto de tener que hacer lo que pudo o lo que la vida le permitio hacer, mas no lo que siempre quizo ser, tanto en lo académico, como en lo laboral.
Muchos seguramente, en lo académico, "obligados" sencillamente por satisfacer el deseo de sus padres; posiblemente motivado en ellos, por un sueño personal no cumplido. Le escuchaba en alguna ocasión a mi gran amigo Manuel Salvador Williams, la siguiente historia: Un amigo suyo, al momento de iniciar sus estudios universitarios se encontró con un gran dilema, su madre quería que fuera Contador y su padre soñaba con que su hijo fuera un gran Abogado, este hombre seguramente en un acto de gran "sabiduría" decidió darle gusto a sus dos padres e inicio estudios simultáneos en ambas carreras. Una vez obtuvo los respectivos diplomas, fue y le entrego a cada uno el titulo que lo acreditaba de acuerdo al deseo de su padre y madre respectivamente, el discurso fue: Espero con esto haber cumplido el sueño de cada uno, pero yo ahora voy a estudiar teatro que es lo que quiero hacer el resto de mi vida. Que interesante, pero por que no lo hizo así desde el principio? no soy quien para juzgar.
Para otro tanto en lo laboral, producto de no haber encontrado ninguna otra oportunidad y obligado por la necesidad tuvo que aceptar esa posibilidad que se le presento. Otros producto de la tradición, o bien, el oficio realizado por sus generación desde tiempo atrás o dándole continuidad a la empresa familiar.
Gozo para algunos, frustracion para otros, no se.
Observando un programa que se transmite actualmente en nuestra television, que busca talentos en nuestro país, podía evidenciar la abundancia de talento de nuestros compatriotas, pero también lo que la busquedad de nuevas oportunidades, lleva al ser humano al borde del ridículo.
Pero me impacto la historia y decisión del siguiente participante, la cual relata en el siguiente vídeo:
La historia de este hombre Jhon Ardila, ejemplifica de sobremanera lo antes comentado, a muchos les toca hacer lo que toco, mas no lo que quizo. Es increíble ver como un hombre a sus 49 años, después de 25 años como un miembro casi de la utileria de un grupo de mariachis, tocando la guitarra, decide dejar atrás esta etapa de su vida y lanzarse al mundo del canto lírico. Con la actitud de este personaje se hecha al traste con varios mitos:
1. Mas vale pájaro en mano que cien volando: muchos te dirán, siga haciendo lo que ha hecho durante toda su vida, como se le ocurre cambiar y a estas altura de su vida. En este momento no sabemos si va o no a tener éxito en su campaña, seguramente con ese talento escondido durante tantos años si lo logre. Pero de no ser así, le quedara la gran satisfacción de haberse decidido a querer hacer realidad su sueño.
2. Ya se le paso la hora y no lo hizo: En una sociedad como la nuestra, que considera que una persona mayor de los 45 años, laboralmente ya es vieja, cobra admiracion que este hombre haya tomado su decisión "a pesar de su edad" y lanzarse a un mundo incierto. Solo el tiempo nos dirá, ojala lo pueda cumplir, estoy seguro que así sera.
3. Lanzarse a un genero que definitivamente no es popular en nuestro medio, por el contrario practicado por algunas personas rodeadas de cierto aire elitista. Además de hacerlo sin ningún estudio profesional, basado 100% en un talento natural y autodidacta. Comprobado para muchos que así también se puede.
Gracias Jhon por darnos este gran ejemplo, que Dios te bendiga y puedas cumplir tu sueño.
A la luz de la Psicología, encontramos el siguiente comentario referente a la frustracion:
Cuando hay un impulso, un deseo, y la persona no es capaz de
satisfacerlo, aparece entonces lo que en Psicología llamamos frustración. Que se
manifiesta como un estado de vacío o de anhelo insaciado.
El proceso de madurez no es más que una larga carrera de
obstáculos. A lo largo del desarrollo vital nos encontramos con numerosas
barreras que impiden o dificultan la realización de nuestros deseos e
impulsos.
La auténtica madurez se consigue cuando asumimos nuestras
limitaciones. Cuando sabemos convivir con las frustraciones producidas ante
acontecimientos insuperables. Cuando nuestras metas y objetivos se asientan
sobre un plano real, relegando nuestras fantasías al campo de la ensoñación,
sabiendo en todo momento que no somos dioses ni superhombres.
Muchos problemas vienen del mundo de las frustraciones que
desencadenan en las personas comportamientos agresivos tanto hacia el exterior
como hacia el interior, transformando al individuo en un ser antisocial o
autodestructivo.
Una persona puede sufrir heridas psíquicas como consecuencia
de un acontecimiento o situación que influye de forma negativa en su vida.
Algunos acontecimientos de la vida pueden marcarnos de manera decisiva ya sea
por la intensidad de ese acontecimiento ya sea porque se trate de alguien
psicológicamente débil.
Por ejemplo, un desengaño amoroso puede hacer que una
persona cambie de actitud respecto a las personas del sexo opuesto, puede
producirse un distanciamiento afectivo o cierta desconfianza a la hora de
plantearse la posibilidad de una nueva relación de pareja.
Los traumas pueden producirse a cualquier edad, aunque quizá
la edad más frecuente sea la infancia y la juventud ya que son los periodos en
los que personalidad no se ha configurado aún y cualquier acontecimiento puede
influir de forma más decisiva.
Tampoco hay que pensar que determinados acontecimientos,
como agresiones, humillaciones, abandono o pérdida, producen traumas de manera
inevitable. La misma situación, puede influir de manera muy diferente en dos
personas. Por ejemplo un suspenso puede motivar a un muchacho para estudiar más
o cambiar su método de estudio, y puede también desmotivar por completo a otro
que pierde la confianza en su capacidad para conseguir cosas por sí
mismo.
De una experiencia dolorosa, unas personas aprenden,
reflexionan y obtienen conclusiones positivas que les hacen por ejemplo más
flexibles, tolerantes e incluso fuertes. Otras, sin embargo, se hunden y no ven
salida.
SILVIA BAUTISTA
Si la falta de desicion en tu vida es por temor de equivocarse dada la falta de conocimiento, la biblia en Santiago 1:5 nos dice: "Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada".
Si esto no fuera suficiente, dice en Proverbios 3:4-6, :
"Y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres. Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas".
Lo mas importante, es que tengas humildad suficiente, para aceptar que te has equivocado por mucho tiempo y mas aun para afrontar el numero de bendiciones que Dios tiene para ti. Dice en el Salmo 25:9, "Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera".
Es el momento de hacer lo que siempre has querido!!!
Dios te bendiga.
