domingo, 23 de agosto de 2015

ENVOLTURAS DE CHOCOLATE

Un día una madre comenzó a regañar a su hijo por lo 

tarde que se había levantado, -¡mira la hora!, ¿Qué 

piensas quedarte ahí dormido todo el día?¿que no 

piensas ir a la escuela?- el niño adormilado se sentó a la 

orilla de la cama mirando al suelo, la madre continuó.



- te he consentido demasiado, siempre permitiéndote 

llegar tarde al colegio, definitivamente TE FALTÓ 

SUFRIR, a mí, mis padres me castigaban una 

semana por cada minuto que me retrasara… - , la madre 

se enfureció cuando el niño permaneció sentado, con la 

mirada fija en el suelo, 


-si tú me ignoras, yo también lo puedo hacer- dijo antes 

de salir de la habitación.

Al final del día la madre había cumplido su amenaza y 

sin dirigir palabras al niño se fue a su habitación. Sobre 

su almohada había un sobre con una carta adentro:


-mami perdóname, no quería ignorarte, solo buscaba las 

palabras para explicarte mis sentimientos. Tú dices que 

me hace falta sufrir, pero yo creo que el sufrimiento 

viene con diferentes envolturas como las de los 

chocolates que a veces me compras, hay muchas maneras 

de sufrir. 



Yo no sufro en casa pero sufro en la escuela. Mami 

perdón si no te lo dije, pero no quería que sintieras dolor 

si te decía que en la escuela me molestan, no tengo 

amigos, nadie me escoge en su equipo, por eso 

no me gusta ir a clases. Perdóname, si quieres de ahora 

en adelante me levantaré muy temprano e iré a la escuela, 

me esforzaré, lo juro, pero por favor no 

me vuelvas a ignorar-.


La madre levantó el rostro con lágrimas en los ojos y vio 

a su hijo asomándose sigilosamente por la puerta de la 

habitación, con una triste e inocente mirada en su rostro...



Tanto la alegría como el sufrimiento tienen infinidad de 

envolturas, pero al final el chocolate bajo la envoltura es 

lo importante.

En el caso de la alegría, muchos no pueden verla, porque 

creen que les va a llegar con la misma envoltura que a los 

demás.

Y con el sufrimiento te digo que, nunca oses decir que 

solo tú eres el que sufre mientras que los demás gozan de 

alegría, pues el dolor se presenta y percibe distinto para 

cada persona.



A los padres con esto, les prohíbo que ignoren a sus 

hijos, nada daña más a un hijo que la falta de atención, 

no pretendan no ver un problema, hablen, 

entiendan y escuchen a sus hijos.



                                                                   by:(Megumi Konno)